Embarazo y salud bucal

En el período de embarazo se deben tomar cuidados extras para la salud bucal. Una mujer embarazada tiene necesidades específicas para el cuidado de su boca que son necesarias conocer y cumplir: buena higiene y nutrición que no solo ayudarán a prevenir problemas durante su embarazo, sino también en la salud general y dental de su futuro bebé.

Nutrición y dieta.

Aquello que se ingiere afecta el desarrollo de los dientes del bebé; el proceso de calcificación del diente (su endurecimiento) comienza en el tercer mes de embarazo y es importante que en este período sean suministradas en cantidades suficientes especialmente vitaminas A, D, C, calcio y fósforo. Su deficiencia puede promover una formación anormal de la pieza dental.

Una dieta balanceada diaria (pan, cereales, frutas, vegetales, lácteos, carne y pescado) proveerá las cantidades correctas para alimentarse la madre y su bebé.

Muchas mujeres durante el embarazo tienen deseos de comer entre comidas y, frecuentemente consumen alimentos ricos en azúcar. Este hábito puede ser muy dañino para su salud dental porque el azúcar es una invitación a la caries dental. El problema se inicia por la placa dental (capa delgada, pegajosa e invisible de bacterias dañinas que constantemente se forman sobre sus dientes). El azúcar unido a la placa forman ácidos y cada vez que se come azúcar, los ácidos atacan el esmalte dental por lo menos durante 20 minutos. Por eso no es la cantidad sino las veces que se ingiere azúcar durante el día. El mejor consejo es “reducir” el número de veces que se comen alimentos ricos en azúcar y remover esa dañina placa mediante una correcta higiene dental. 

Gingivitis.

Cuando las encías se transforman de rosadas a rojas, se hallan blandas y fácilmente sangrantes al cepillado, estas características se denominan “gingivitis” y pueden traer problemas en encías y al hueso que soporta los dientes.

La placa es causa principal de la patología y en el embarazo se presenta con más frecuencia debido a un elevado aumento de los niveles hormonales.

La prevención posible de estas alteraciones es mantener los dientes limpios, cepillados, pasando el hilo dental correctamente todos los días y llevando una dieta balanceada.

Cuidados en el embarazo.

Un tratamiento odontológico puede realizarse durante el embarazo, sin embargo, conviene evitarse durante los tres primeros y los tres últimos meses. 

Del cuarto al sexto mes de embarazo son los mejores meses para efectuar el tratamiento odontológico.

Las radiografías serán tomadas cuando sean indispensables, si bien la cantidad de radiaciones es muy pequeña y generalmente no llegan al abdomen, vale la pena el uso del delantal plomado para su protección.