Es un tumor canceroso que se forma en los tejidos de los ovarios (glándulas reproductivas femeninas). Estas células se multiplican rápidamente y pueden invadir y destruir tejidos sanos del cuerpo.

Los ovarios están compuestos principalmente por tres tipos de células: en cada tipo de célula se puede desarrollar un tipo diferente de tumor:

• Tumores epiteliales se originan de las células que cubren la superficie externa del ovario. Es el más común.
• Tumores de células germinales se originan de las células que producen los óvulos.
• Tumores del estroma se originan de las células del tejido estructural que sostienen el ovario y producen las hormonas femeninas estrógeno y progesterona.

Algunos de estos tumores son benignos (no cancerosos) y nunca se propagan fuera del ovario. Los tumores ováricos malignos (cancerosos) o tumores de escasa malignidad (bajo potencial maligno) se pueden propagar (hacer metástasis) a otras partes del cuerpo, y pueden causar la muerte.

¿Qué síntomas puede desarrollar?

No hay sintomatología específica y habitualmente se confunde con la que puede producir el aparato digestivo y la vejiga, especialmente si es persistente.

• Hinchazón o inflamación abdominal.
• Sensación de saciedad rápida al comer.
• Pérdida de peso.
• Molestia en la zona pélvica.
• Fatiga.
• Dolor de espalda.
• Alteración del tránsito intestinal.
• Necesidad frecuente de orinar.

Es posible que el cáncer de ovario no cause signos o síntomas temprano. En el momento en que se presentan puede ser que se encuentre en un estado avanzado.

¿Cómo se diagnostica?

Las pruebas y los procedimientos que se utilizan para diagnosticar el cáncer de ovario son:

• Examen pélvico: realizado por el médico ginecólogo.
• Pruebas por imágenes: ecografías o tomografías computarizadas del abdomen y la pelvis.
• Análisis de sangre: marcadores tumorales, proporcionan indicios acerca del diagnóstico y pronóstico.
• Cirugía: Algunas veces, el médico no puede estar seguro del diagnóstico hasta practicar una cirugía para extirpar un ovario y examinarlo para detectar signos de cáncer.

Es recomendable que las mujeres se sometan regularmente a exámenes médicos, especialmente aquellas con antecedentes familiares de la enfermedad o que pertenecen a grupos de riesgo.

¿Qué factores pueden aumentan el riesgo de padecer cáncer de ovario?

• Envejecimiento. 
• Sobrepeso.
• Maternidad tardía.
• Terapia hormonal menopaúsica.
• Antecedentes familiares de cáncer ovárico. 
• Antecedentes propios y familiares de cáncer de mama.

¿Qué factores que pueden reducir el riesgo de cáncer de ovario?

• Embarazo y lactancia: Con cada embarazo a término se reduce el riesgo y con la lactancia se puede reducir aún más.
• Control de la natalidad: El uso de anticonceptivos orales (píldoras anticonceptivas) por periodo prolongado reduce el riesgo de cáncer de ovario y continua años después de suspender su toma. 

Otras formas de regulación de la natalidad como la ligadura tubárica (atar las trompas de Falopio) y el uso a corto plazo de dispositivos intrauterinos también se han relacionado con un menor riesgo de cáncer de ovario.

• Una histerectomía: extirpación del útero sin remover los ovarios, también puede reducir alrededor de un tercio el riesgo de cáncer de ovario.

La detección precoz es fundamental para mejorar el pronóstico, la calidad de vida y las tasas de supervivencia.

Fuentes: Clínica Mayo / American Cancer Society / Inst. Nacional del Cáncer (Arg).