En nuestro país la Hepatitis A es una enfermedad endémica, es decir que siempre está presente en la población en forma de casos aislados. Periódicamente se presentan aumentos en número de casos (“brotes”) asociados al período escolar.
El virus que produce este tipo de enfermedad ingresa al organismo por la boca, a través del agua, los alimentos, y las propias manos que hayan tocado objetos contaminados con material fecal.
Esta enfermedad es más frecuente en niños y adolescentes, su evolución es generalmente benigna, en algunos casos no se presentan síntomas. Cuando éstos aparecen, el comienzo de la enfermedad generalmente es repentino y viene acompañado de fiebre, malestar y decaimiento general, falta de apetito, náuseas, dolores abdominales y musculares y cefalea.
Posteriormente, puede aparecer: color amarillento de la piel y conjuntiva ocular, materia fecal decolorada y orina de color “coca cola”.
El curso de la enfermedad debe ser controlado por el médico, quién indicará además las medidas preventivas para el grupo familiar.
Las principales medidas de prevención están referidas tanto a la higiene personal, como a la del ambiente:
Fuente: Ministerio de Salud.